Termine un trabajo, me cambie y dije: “a dormir”. Pero no todo era tan fácil, al menos no esa noche.. Me acosté con la molestia de algo que tenia que hacer al día siguiente, no quería hacerlo pero tenía qué, así que lo único que me quedaba por hacer era eso, dormir.
Al despertar no me acordaba de que era lo que tenia que hacer, así que mi mañana fue normal hasta el instante en el que me fui a bañar y empecé a recordar.. Me demore al bañarme creyendo así que el tiempo iba a pasar, que se me iba a hacer tarde y que ya no tendría que hacer eso, pero no fue así me cambie unas cuatro veces ya que nada me parecía correcto para ese momento, me peine de forma diferente (después de todo era algo especial, algo que me ponía los nervios de punta de tan solo pensarlo), y salí de mi casa repitiéndome en el camino las palabras exactas.
Cuando llegue a ese lugar estaba mas tranquila de lo que pensé que podría estar, me encontré con mis amigas y les repetí a ellas esas palabras que me estuve diciendo todo ese tiempo para saber si les parecía correcto; ellas me formularon una sonrisa y asintieron con la cabeza como dándome el “visto bueno”.
Subimos las escaleras, estaba a pocos minutos de tener que hacer eso. Al entrar sonreí y salude a los demás; nadie tenía que saberlo, al menos no nadie más. Llego el momento y entró por la puerta como si fuera un día sin nada en especial, sonreí y salude como todos los demás lo hicieron; un poco de charla con el resto, un “jajaja” y un “cállate” nunca están de mas.
De pronto todo quedo en silencio, y con una sonrisa menciono mi nombre.. Abrí los ojos, no lo podía creer! ¿Tenia que ser precisamente yo la primera en hablar? “Esta bien! Diré lo correcto & no cometeré errores, no dejare que el miedo se apodere de mi; puedo hacerlo, yo se que puedo” me dije a mi misma.
Sabia que al menos no tendría que hacerlo sola.. Mire a T y me estaba mirando, sonreímos y dijimos: “VAMOS”. Todos se quedaron en silencio a la espera de que dijéramos algo, así que empezamos.
Cuando menos lo esperaba se había acabado. Paso mas rápido de lo que pensé! Dios me sentí tan bien! Estaba tranquila y lo mejor de todo fue que lo hice bien! No me olvide de ninguna de esas palabras que repetí tantas veces, “de algo tenía que servir que pareciera loca hablando sola” pensé.
Y así acabo ese momento que pensé sería el peor. Estaré mas tranquila la próxima vez, se que no tendré que hacerlo sola así que.. ¿Por qué no relajarme y disfrutarlo? Conozco bien a las personas que estarán presentes, la próxima vez será diferente..
Después de todo fue mi primera exposición, la segunda será mejor.
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